Y el Ministerio alimenta el negocio eliminando en el Concurso General de Traslados estatal la limitación de másteres a baremar, procedentes –en su mayor parte- de universidades privadas con poco rigor académico. Con esto, el Ministerio contribuye a que en un futuro próximo, en el acceso a la función pública docente y en los mecanismos de promoción, se beneficie aún más a los aspirantes de estratos sociales más acomodados, promoviendo un importante endeudamiento, y por tanto una mayor precarización, para los aspirantes de la clase trabajadora más precaria.